martes, 24 de mayo de 2011

Laranja e Cenoura


    Un día mi padre me preguntó si quería "ese refresco que traje una vez", y le dije que sí. A continuación le dije el nombre, pero ante la imposibilidad de que se quedase en su memoria le hice una descripción detallada de cómo era la botella, el color del líquido, y dónde podía encontrarla en el supermercado. Cuando volvió a casa, vi que se había equivocado.

    Ayer, fue 22 de mayo, el día en el que se celebraban las elecciones municipales en éste nuestro querido país. Fue un proceso electoral especialmente complicado y agrio, en el que la omnipresente crisis, el movimiento Democracia Real y el partido político que el Tribunal Constitucional declaró legal, fueron los principales protagonistas. Los políticos hacían sus previsiones, arengaron a las masas en contra de aquellos que pensaban de manera diferente y finalmente se encontraron con la opinión de los electores.

    La opinión de los electores fue la de castigar al actual partido en el gobierno de la nación votando al partido de signo contrario. No nos engañemos. Es la misma circunstancia que llevó al actual partido gobernante al lugar que ocupa desde hace siete años, el llamado, voto de castigo. Como resultado, el partido mayoritario de la derecha gobierna en 41 capitales de provincia. Una cifra escandalosa que debería hace reflexionar profundamente al partido mayoritario de izquierda. ¿Acaso alguien duda de que lo vaya a hacer? Sí, reflexionarán, y también se enrocarán en sus posiciones para afrontar el futuro más próximo, con las elecciones generales el año próximo como objetivo.

    Y ahora, ¿qué? Ahora viene un modelo de gobierno, que no es nuevo, como dicen los ganadores, ni diferente tampoco, que tendrá su confirmación el próximo año, a menos que las cosas cambien radicalmente; y es ahí donde está el verdadero problema.

    El futuro es muy oscuro, como dice la canción, peor no sólo por la situación económica objetiva, sino porque quienes tienen que arreglarlo no lo harán, y porque los principales responsables de que se haya llegado aquí seguirán patrocinando carreras de Fórmula Uno y campenatos de fútbol en lugar de responsabilizarse por haber arruinado las vidas de millones de personas en nombre de la codicia.

    El problema es que los políticos son los mismos corruptos y cobardes que dicen una cosa y practican la contraria. Todos por igual hablan de que su preocupación principal es el común de la ciudadanía, y que trabajan o trabajarán sin descanso por mejorar la situación. Todos por igual trabajarán sin descanso para mejorar su situación personal olvidándose del común de la ciudadanía. Hay ejemplos de esto en ambos partidos. En Valencia y su comunidad autónoma gobierna la derecha, mientras que en Sevilla y su comunidad autónoma gobierna la izquierda. Son partidos diferentes, pero los que gobiernan tienen la codicia, la mentira y la corrupción como lema.

    Creo que si de verdad se interesaran por sus gobernados, no sólo no habría corrupción ni se darían los problemas que se dan ahora. De hecho, no habría ni derecha ni izquierda, tan solo unos pocos poderosos trabajando por el bien de todos. Claro que, soñar es gratis, y al fin y al cabo, estamos hablando de seres humanos, no de animales inteligentes, y si además añadimos que se trata de esa subespecie conocida como político, la situación se torna más complicada de llegar a ser realidad.

    
    Mi padre me trajo un refresco de esos que no tienen gas de la misma marca que el supermercado que lo vendía y que finalmente resultó estar bastante bueno. La bebida era una combinación de naranja y zanahoria (aparte de la consabida retahíla de aditivos artificiales), dos elementos cuya única similitud es el color, pero que combinados resultaron dar un producto más que satisfactorio.

    

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La porquería de políticos que tenemos en nuestro país, lo único que consiguen después de terminar su mandato, es hartarnos y que saltemos como pulgas al partido contrario. Solución: ¿Partidos minoritaios?
Pues después de lo que ha pasado en el país vasco con Bildu, no se que decir...vamos de Guatemala a Guatepeor.

Anónimo dijo...

... ZP dimision YA!!!!